25 enero 2006

CRONISTA DE GUERRA

De nuestro enviado especial. Rosario, Santa Fe. Este año depara mucho viaje evidentemente. Por ahí no tanto como el 2004 o el 2005, pero mucho al fin. Y al igual que cualquier viaje de 10.000 kilómetros, este empezó con el primer paso. Este primer paso me condujo al back-yard de Buenos Aires, a Santa Fe. A Showcase Rosario para ser exactos. Es curioso como uno se olvida de las cosas. Genuinamente creo que lo único que es imborrable es andar en bicicleta. El resto se esfuma rápido. Me olvidé por completo cómo es esto de viajar por negocios (si es que se puede catalogar esto como eso). Me había olvidado de que tengo que pedir ticket o factura de cualquier cosa que compro. De hecho hoy no le pedí ticket al tachero y mi primer viaje fue cortesía de Andrés Briano, ya que no lo puedo pasar como gasto. Me había olvidado de lo que era comer solo en un Restaurant. Ves a la gente pasar. Gente que es de tu misma raza y nacionalidad, pero gente que, si mirás de cerca, no es idéntica a la de Buenos Aires. (Esta vez si pedí ticket) Me pregunto por qué escribo mejor estando afuera de Buenos Aires... ¿Será el agua?

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