SE DICE QUE EN EL REINO DEL REVÉS...

Tengo ganas de vomitar, lo que en mí, es un síntoma clásico de exposición prolongada a la obsecuencia y demagogia. Escuché la cadena nacional de la Presidente. Si bien el rechazo que me causó suele hacerme escribir diarréicamente, esta vez voy a tratar de ser breve y concreto.

• Me dio la impresión que todo estaba guionado. Que los aplausos estaban editorialmente ubicados, como en un capítulo de una sitcom.
• Me causa gracia que uno de sus reclamos sea que una empresa supuestamente valuada en USD 2.000.000 fuera adquirida por USD 997.000, cuándo ella viene de haber pagado $7,50 el metro cuadrado por unos terrenos fiscales en el Calafate, que después vendió por USD 24. Levante la mano toda aquella persona que SE NEGARÍA a comprar bienes baratos y venderlos caros... ¿Nadie?
• ¿No les parece excesivo que la misma Presidente sea quién se encargue de un tema como este? ¿No tiene nada más importante que hacer?
• Voy a investigar si algún Estado del primer mundo es dueño de la única fuente de papel para diarios del país. A mi me resulta directamente anticonstitucional, pero por ahí me equivoco. (Venezuela no cuenta como Estado del primer mundo... aunque sí huela a inspiración. ¡Exprópiese!)